Una guerra olímpica

Le hablaron de un museo donde se conservaban botines de guerra. Sintio curiosidad por saber como una matanza puede ser al mismo tiempo un deporte.

Sus planes

Le preguntaron, un dia, si tenia planeado algo para el fin de semana. Al rato empezo a hacer avioncitos de papel como los que hacia de niño.

Cuando extraña

Es un hombre solitario, pero eso no lo despoja de la historia. Cada tanto tiene nostalgias, recuerdos que mira con extrañeza, con la extrañeza del anhelo de un pasado irrepetible, pasa por un quiosco, pide un familiar de milanesa, y una gaseosa de litro, envase familiar. Juntos se sientan en la mesa, Melanio se siente menos solo.

Sus compras

Si camina por los locales comerciales, disfruta detenerse en los que anuncian liquidación, despliega su silleta rebatible, se queda por largo rato. Quiere ver como y cuando sucede que esa ropa puede convertirse en un rio de colores que inunde el local.

Calle, hable

Melanio tiene tendencias a la espectación ociosa, que algunos no tardan en estigmatizar como catatonia. Es una usina de silencios mientras todos hablan. Sin embargo escucha atento, dentro siente la presión por ser convocado a dar su opinión. Da su verdad sobre las cosas, disiente, asiente, comenta, intercambia unas palabras, la presión baja, cede. Eso es ahi su ex presión.